Cada día es mas común ver a perros de raza vagando por las calles. Y esque se podría pensar que por ser catalogados como perros de raza no deberían estar en el abandono.
Lo cierto es que ni perros de raza ni perros que no son de raza deben pasar por estas horribles circunstancias. Ellos merecen tener una vida digna y de calidad a lado de personas que los amen.
No es solo pasear con ellos y hacerles cariños o tomarles fotos tiernas, también es cubrir todas sus necesidades, alimentarlos, bañarlos, estar atentos de su salud. Por eso, cuando llegan a presentar alguna enfermedad, muchos terminan abandonándolos cruelmente.
Posiblemente este fue el caso de Miracle, un husky siberiano, que fue encontrado en condiciones muy crueles en las calles de San Bernardino, California.
Gracias a personas de gran corazón, como es el refugio de animales de San Bernardino lo encontraron y lo llevaron a su refugio. Posteriormente hicieron una publicación en Facebook para que alguien pudiera hacerse cargo de el.
Toby Wisnesky, CEO y fundador de Leave No Paws Behind, vio la publicación y no dudo en hacer algo por el perro enfermo.
La gente no suele adoptar animales enfermos y mucho menos con enfermedades de la piel.
Todo parecía indicar que Miracle el husky siberiano abandonado, tenia sarna.
La sarna es una enfermedad que afecta gravemente a los perros y puede ser extremadamente contagiosa. Es por eso que casi nadie se anima adoptar un perro en ese tipo de condiciones, sin mencionar que los refugios no pueden tener por mucho tiempo a perros con estas enfermedades ya que podrían contagiar a los demás animales.
Así que el destino de Miracle estaba en juego ya que al tener sarna, este podría ser sacrificado.
Toby llamo al refugio y le dijeron que nadie había estado interesado por Miracle y que si nadie llamaba, ese día lo sacrificarían.
Toby fue inmediatamente a buscarlo y se encontró con la mirada más impresionante de su vida. “Parecía que quería decirme algo, era como si se preguntara si eso realmente estaba sucediendo y si realmente alguien estaba ahí para rescatarlo y hacer algo por él”, comentó el fundador de Leave No Paws Behind.
“De solo recordar el momento siento ganas de llorar, lo tomé y lo llevé al veterinario, cuando salimos del refugio movía su cola”, agregó Toby.
Después lo dejaron internado en el hospital veterinario para que los médicos le puedan ofrecer el mejor tratamiento y que se pueda sanar pronto. Además lo aislaron de otros animales para evitar un contagio.
El personal del hospital está muy encariñado con Miracle, ya que es un perro muy cariñoso y agradecido con sus grandes salvadores. En ocasiones, no deja de lamer sus patas y sus cuidadores le dicen que ya no tiene que preocuparse por eso, que ellos lo van a curar. Él solo los mira con agradecimiento.
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